El pasado Abril fue el cumpleaños de mi amigo y socio Alber, fue un cumple de esos en los que cambias de dígito, así que pensé en hacerle algo especial. Ya llevaba tiempo queriendo hacer algún juego de Harfor, y mi socio me habló de Love Letter, un juego de cartas sencillo e ideal para re-diseñar. El original trata de un grupo de peña (de época victoriana) que intenta hacerse con el amor de la princesa. La versión Harfor Letter es similar, sólo que todos (los personajes principales y más molones de Harfor the Designer) tratan de ganarse el amor del príncipe Harfor. Todo en plan absurdo, como debe ser.
Me quedo satisfecha con mi obra y… bueno, me voy a comer, que así no puedo pensar y mi gata me está diciendo algo en plan «cambia la arena de una vez, so guarra!», pero con mucho amor.